124 Páginas – 1 edición ISBN: 978-958-48-3705-9
Marca de manera confusa, el problema que se presenta en el transcurrir. Entre el proceso de crecer, se transita por constantes situaciones, que no es demasiado difícil interpretar, entre su combinación de variables presentes.
He leído el libro Entre Líneas de Liliana Andrea Calderón y nos habla sobre el proceso de desarrollo y crecimiento del ser humano, porque narra los estados de cada uno desde una perspectiva diferente, mas humana, sensible y comprendiendo cada etapa del desarrollo del ser en sí mismo. Ha permitido el análisis de temas tan relevantes y aplicables a la calidad del acompañamiento que necesitamos como seres humanos, sobre todo en esta etapa de tantos cambios de distintas clases (emocionales, físicos, psíquicos, etc.) que pueden generar confusiones que sin una guía adecuada desembocarían en perdernos a través del laberinto que puede llegar a ser la vida misma.
Considero que la parte que mas me ha gustado es cuando se refiere al análisis que todos en algún momento nos hemos hecho y es la pregunta: ¿para dónde voy?, la forma abierta y concreta con que describe las situaciones permite que además de ser un referente importante con respecto a la etapa de la adolescencia, también como adultos nos lleve a la reflexión e introspección de lo que somos y lo que queremos ser.
La frase que mas me llamó la atención fue. “esperanza, por querer reconstruir un mundo que se conoce poco, pero extraordinario y lleno de diferentes cosas”, pienso que es una frase que inspira, que como dicen popularmente nos permite creer que un futuro mejor es posible, sería algo así como la luz al final del túnel.
Creo que es un libro que me ha dejado reflexionando sobre la importancia de darnos el permiso de comprender, de estar en el lugar del otro, de no dar nada por sentado y que en la diferencia se encuentra la esencia de lo especial, que no hay una forma correcta ó incorrecta de desarrollarse sino que el camino es tan único como cada uno de nosotros, que como seres vivos evolucionamos a nuestra mejor versión en cada paso, en cada pensamiento y cada palabra; eso nos hace tan ricos como humanos.
María Fernanda Sánchez